L’Antic Colonial recupera los tradicionales suelos de madera entrelazada: Legacy

L’Antic Colonial ha presentado recientemente su nueva colección de suelos de madera natural Legacy, que recupera el tradicional diseño entrelazado utilizado en las construcciones de alta montaña, aportando la calidez y resistencia necesarias para garantizar acabados perfectos en estos espacios.

A diferencia de las típicas lamas longitudinales, Legacy se presentan con un formato cuadrado de 100×100 cm y 2 cm de espesor, con una estructura multicapa compuesta por una mezcla de materiales naturales de la mejor calidad. Así, cada pieza de este parquet cuenta con una primera capa formada por tablillas de roble francés, dispuestas sobre una segunda capa de tablero de abedul.

Para conseguir este característico diseño, las tablillas de roble se han encolado sobre el tablero de la base, con una composición entrelazada, enmarcada para configurar un bonito panel de aspecto acogedor que recupera la esencia de una tradición centenaria. Esta composición, junto a las cualidades técnicas de los materiales naturales empleados, confiere a este parquet de L’Antic Colonial una gran resistencia térmica, que permite su colocación sobre sistemas de suelo radiante, muy habituales en las construcciones de las regiones montañosas.

Actualmente, la colección Legacy está disponible en cuatro opciones cromáticas, que permiten su adaptación a estancias de cualquier estilo decorativo: el suave y luminoso Legacy Ceniza, los intensos tintes rojizos de Legacy Vulcano, el cálido Legacy Cognac y la naturalidad de Legacy Tobacco.

Con el objetivo de garantizar la resistencia a los efectos de la luz solar de los acabados y coloraciones de estos suelos de madera natural de L’Antic Colonial, cada pieza ha sido tratada mediante un proceso de tintado, sobre el que posteriormente se ha aplicado una doble capa de aceite UV.

Adicionalmente, para facilitar las labores de instalación, el parquet Legacy cuenta con un sistema de machihembrado perimetral que requiere de muy poco esfuerzo, ya que posibilita la colocación de las piezas mediante mártires, garantizando así unos acabados perfectos y duraderos.